jueves, 30 de octubre de 2014

El Māristān de Garnāţa

El Māristān de Garnāţa u Hospital de Locos o Inocentes, fundado por Abū ´Abd Allāh Mwḥāmmad V al-Ganī bi-Llāh su construcción duró veinte meses como recogía uno de los fragmentos de su lápida fundacional: comenzado a levantarse “en la segunda decena del mes de muḥarraq del año 767 de la Hégira (27 septiembre - 8 octubre del 1365 de Cristo)” y acabado “en la segunda decena del mes de shawwal del año 768 de la Hégira (9-18 de junio del 1367 de Cristo). ç Primer manicomio europeo, adelantandose en 40 años al Bethlem Hospital de Londres (fundado en 1403) y al del Padre Jofré de Valencia (1409). Ubicado en al-rabád Ajšariš/barrio de Axares.lo que hoy es el Bajo Albayzín, en la margen derecha del río Darro, limitando al oeste con la calle por la que se bajaba al Bañuelo, al sur y al este tuvo casas adosadas frente a las que se encontraban respectivamente la Bāb al-Difaf/Puerta de los Tableros y la llamada Casa de Zafra. Al norte con la Calle Portería de la Concepción, en cuya dirección se situaban su fachada y puerta principal. Justo en ese acceso, presidiendo la entrada, había sido colocada la lápida fundacional en la que figuraba el nombre del ´Āmir que había mandado levantar el edificio y la fecha en que lo había hecho. Lápida fundacional.- Dos piezas de mármol que constituyen una estela en forma de puerta con arco de herradura apuntado, contiene 26 líneas, cuya traducción es la siguiente: Loor a Dios. Ordeno la construcción de este maristán, como muestra la amplia misericordia para con los débiles enfermos musulmanes y como acercamiento útil –si Dios quiere- al Señor de los mundos, perpetro su buena obra que habla en lengua elocuente, y realizo sus deberes de caridad para el transcurso y la sucesión de los años, hasta que Dios herede la tierra y a aquellos que están en ella, pues El es el mejor de los herederos, el señor, el imán, el sultán, el héroe, el grande, el ilustre, el puro, el victorioso, el mas feliz de su gente en su gobierno, el primero de ellos en abalanzarse en la senda de Dios, el detentador de las victorias, de las acciones favorecidas por Dios y de la magnanimidad, el que recibe la asistencia de los ángeles y del espíritu, el defensor de la tradición, el refugio de la religión, el príncipe de los musulmanes al-Gani bi-llah Abū ´Abd-Allāh Mwḥāmmad, hijo del señor, el celebre, el sultán ilustre y elevado, el combatiente por la fe, el justo, el magnánimo, el feliz, el mártir, el santificado, el príncipe de los musulmanes Abū l-Hayyay, hijo del señor, el sultán ilustre, el celebre, el grande, el magnificado, el victorioso, el que derrota a los politeístas y subyuga a los infieles injustos, el feliz, el martir Abū l-Walid ibn Naşr al-Ansari al-Jazrayi. ¡Que dios le otorgue la aprobación de sus obras y su cumplimiento, por su favor completo y la recompensa amplia de sus esperanzas! Por ello realizo una buena obra que no tuvo precedente desde la introducción del Islam en este país, por ella agrego un bordado de gloria al excelente manto de la guerra santa y busco la faz de Dios, deseando la recompensa, pues Dios es el poseedor de la gracia inmensa. El ha preparado una luz que vaya delante y detrás de el “el día en el que no sean utiles ni riqueza, ni hijos salvo presentarse a Dios con un corazib integro”. Y tuvo lugar el). Dios no descuida la recompensa de los que realizan buenas obras ni frustra el esfuerzo de los benefactores. Salve Dios a nuestro señor Mwḥāmmad, sello de los profetas, a su familia y a sus compañeros, todos. Era un edificio de planta rectangular de 1015 m2, con crujías y pórticos en los cuatro lados, organizados con dos plantas de altura. Los materiales empleados en su construcción fueron ladrillo y tapia para pilares y muros, mientras que para zapatas, aleros de tejado, alfarjes y armaduras se usó la madera trabajada de forma muy sobria. Según lo que queda, el edificio tenía planta baja y alta con galerías sobre análogos pilares cuadrados y zapatas con dinteles entre los vanos, como muestra al-funduq al-Ŷadīda/la Alhondiga Nueva, con balaustradas en la superior. A ellas daban las puertas rectangulares de las salas de enfermos y demás dependencias, ignorandose la ubicación de las Bayt al-mā/letrinas, cocina, servicios de consulta y estancia del personal. Es posible que la parte médica y de personal constante estuviera en el ala N, donde se ubicaba la fachada de entrada al edificio. Mostraba puerta de acceso con dintel formado por una composición de cúfico angular de origen inario con el lema dinástico: “ وَ لاَ غـَـلِـبٌ إلاَ اللـَّه wa lā gālīb illā Allāh Sólo Dios es vencedor” Que se lee en posición normal e invertida, lo que se haría mediante el resalte de ladrillo cortado y el relleno de cerámica vidriada, posiblemente azul, ya que así se encuentra exactamente igual en el lema horizontal bajo el alero de la fachada del palacio mudaŷŷan de Pedro I en al-Qaşr/Alcázar de Išbylīya/Sevilla, construida en 1364, unos tres años antes que la del Mārīstan, por artistas naşrīes. Lateralmente parece que ofrecía una labor de lazo. En el primer piso la lápida fundacional de mármol con el texto cursivo y forma de arco de herradura centraba la composición, con alfiz formado por lazo de ocho. Enmarcaba la composicion pilastras sobremontadas por columnillas en el primer piso y otras laterales mucho mas cortas, base de ménsulas de madera superpuestas que sostenían el volado alero. La portada era de ladrillo cortado y en el dintel de la puerta iba el lema de los naşrīes en escritura cúfica; sobre él se encontraba la inscripción conservada en el Museo de Qal´at al-Hamrā. Sus albanegas estaban decoradas con motivos de hojas, todo enmarcado por una faja de entrelazados y columnitas laterales. El resto de la fachada tenía ventanas gemelas y cornisa decorada. En el interior tenía también ventanas sobre los pórticos de su patio rectangular, con dos pisos, cuatro escaleras y cuatro salas en ángulo. El patio estaba rodeado de galerías distribuidas en dos niveles y disponía en el centro de sus dos lados mayores de una escalera que daba acceso a la planta superior. Los pilares de ladrillo y las zapatas de madera con las que se construyeron las galerías repitieron la misma técnica constructiva empleada con anterioridad en la Alhóndiga Nueva, conocida hoy en día como Corral del Carbón. Las escaleras se situaban en el centro de los dos lados mayores. Era posible que el edificio contase con dos áreas separadas por razones de sexo, y que sus pequeñas habitaciones de unos 6 metros cuadrados, repartidas por ambos niveles, sirvieran de alojamiento a enfermos, consultorios médicos, e incluso de salas de estudio para los aprendices de medicina, tenían acceso directo desde los pórticos y galerías además de tener comunicaciones interiores entre ellas. Las ocho naves del edificio se subdividían en un número aproximado de cincuenta celdas, por lo que se calcula una capacidad para doscientos enfermos. Se ha podido constatar que el Maristán se organizó reutilizando elementos de un edificio islámico anterior, quizás una alhóndiga. El centro del patio estaba ocupado por una gran alberca, longitudinal en la que vertían sus aguas dos grandes leones esculpidas en mármol oscuro, para su utilización como surtidores mediante una tubería que, entrando por la base, atraviesa toda la pieza hasta la boca, desaguando a chorro, con una sección interior de 3,5 cm sentados sobre sus cuartos traseros plegadas, reposando en una base lisa, tallada en el mismo bloque, de 1,30 x 0,56 x 0,13 m, habiéndose perdido la parte posterior de una de ellas desde el talón hasta el borde, dejando ver la entrada de la tubería del surtidor. Las cabezas de los leones han perdido sus respectivas orejas, cuya huella puede observarse claramente. El resto de la cabeza y la parte anterior del cuerpo aparecen completamente cubiertos por una larga melena formada por la superposición de grandes bucles, de 11 cm. de largo, que en el eje frontal forman cuatro grandes lóbulos o gotas. Los rasgos de la cara aparecen especialmente marcados por las amplias fauces, resaltadas mediante tres pliegues y una gran dentellada, con mandíbula superior e inferior acusando grandes colmillos que bordean el surtidor. Bajo este despliegan la lengua de 7 cm. de longitud y 6 de base. Igualmente resalta en el rostro un gran hocico con dos lóbulos sobre el que apenas se perciben los parpados de los ojos. El resto del cuerpo de los leones aparece liso, interrumpido únicamente por una larga cola que, atravesando las patas traseras, se pliega sobre el lomo hacia el costado derecho en el león más alto y hacia el izquierdo el león más bajo, hasta alcanzar, en ambos, la melena. Las manos de los leones destacan cuatro digitaciones. Los recientes análisis efectuados en la Fuente, así como los primeros trabajos de restauración de los Leones del Maristán hacen suponer que originalmente estaban pintados, probablemente dorados. Desde 1995 se guardan en el Museo de Qal´at al-Hamrā/Alhambra. El edificio del Māristān de Garnāţa conservó su función algo menos de 150 años, pues tras la conquista de la ciudad por los Reyes Católicos, en una fecha en torno a 1502, se convirtió en Casa de la Moneda. Con tal motivo el edificio sufrió transformaciones ya que la estructura original a base de pequeñas celdas. Se derriban algunos muros de separación de celdas originales, para dar amplitud a las habitaciones para adaptarlas bien a un uso industrial como era la acuñación de moneda que requiriría de espacios más amplios. Incorporando la galería a la nueva sala, se construye un nuevo cerramiento y se decora con grandes escudos imperiales, probablemente ésta sería la Sala del Tesoro. La misma pudo haber sido reconstruida después de la explosión del molino de pólvora situado en el barrio de san Pedro y qie afectó a todo el barrio incluida la Alhambra, suceso ocurrido en 1590. En 1637 el edificio pasó a propiedad privada, probablemente por el traslado de la ceca a la Alhambra, que ya funcionaba desde 1662, durante este periodo el edificio debió sufrir un periodo de abandono y de cambio de dueños hasta el 1748, en los que los frailes mercedarios del convento de Belén, lo venden a José Merchante. Este propietario emprende reformas para adaptarlo a uso comercial, instalando un almacén de vinos con las cuadras correspondientes para los animales dedicados a su transporte, las obras afectaran al ala oriental, también se dispone un nuevo pavimento, quedando una cota más alta que el suelo naşrī original.. A finales del silo XVIII o principios de XIX el edificio se convierte en casa de vecinos y más tarde en cuartel y cárcel de la ciudad. El desgraciado año de 1843 (el mismo en el que se quemó la Alcaycería) el Ayuntamiento autorizó su demolición, pero esta no se completó (solamente se toca el ala oeste y norte), por existir engalabernos/casas empotradas con otras edificaciones medianeras por el lado sur, en su lugar se construyeron edificaciones de escasa entidad, en 1987 los restos del edificio fueron adquiridos por la Dirección de Bienes Culturales de la Junta de Andalucía, realizando excavaciones en seis temporadas. Bajo el edificio naşrī también se han documentado los restos de una qawraya o corredor cubierto que permitía subir el agua del río mediante carros y caballerías. A partir del siglo XI, con la expansión de la ciudad hacia el llano y la construcción de las murallas que dejaron al río en la parte de intramuros, la qawraya perdió su función. Sus posteriores usos, hasta su demolición parcial en 1843, habían ido deteriorando la imagen y la hechura del edificio original, caracterizado por un patio rectangular que contaba en su mitad con una gran alberca de unos 14 x 5 metros, de forma similar al patio y se alimentaba del agua que lanzaban las bocas de dos leones de piedra enfrentados, que hacían las veces de surtidores.