jueves, 13 de junio de 2013

al-Qaşr/Alcázar de Išbylīya/Sevilla

      Empezó a tomar su aspecto de fortificación palaciega, tras la conquista de Sevilla, en 712 por los árabes; que ya desde el año 720 utilizaron el recinto como residencia de sus dirigentes.
     El lunes 12 Muḥarram 230/29 de septiembre de 844 la madīnat fue arrasada por los mayūs/vikingos, y las murallas fueron pasto de las llamas. Tras ello el Āmir Mwḥāmmad ´Abd al-Ramān II ibn al-Ḥakām ibn išām ibn´Abd al-Ramān ibn Mu’awiyya ibn išām ibn ´Abd al-Mālik ibn Marwān. Cuarto ´Āmir Umayyah de Qūrţuba 206/822-238/852, mandó reconstruirlas.
     ´Abd al-Ramān III al-Nāsir ibn´Abd Allāh dispuso la construcción, al lado de la basílica goda de San Vicente, de Dār al-Imāra, o casa de gobierno, una fortaleza exenta al Sur del perímetro urbano, integrada en la actualidad en el conjunto de los Reales Alcázares. El recinto califal, heredero del romano.
      Los ´Abbādíes ampliaron el núcleo palaciego fortificado erigido en el flanco meridional de la madīnat, aportando edificaciones propias al sector que acabaría constituyendo el conjunto de los Reales Alcázares.
     Mwāmmad II ibn ´Abbād al-Mu´támid bi-Llāh 461/1069-484/1091, quien cargado de cadenas, salió de Išbylīya primero a Ţānŷa, de aquí se le condujo a Mequínez. En Mequines permaneció muchos meses, hasta que Yūsuf ibn Tāšfīn mandó trasladarlo a la ciudad de Āgmāt, allá en el Atlas de Marrākuš/Marruecos. En Āgmāt llevó, en la prisión, una existencia triste y dolorosa. Vivía con su família en la miseria. Para subvenir a sus necesidades, su mujer Romaiquia y sus hijas se vieron obligadas a hilar. Mwāmmad II ibn ´Abbād al-Mu´támid bi-Llāh murió en Āgmāt después de una larga enfermedad, en 488/1095, a la edad de cincuenta y cuatro años, cuatro años después que se conquistara Išbylīya el 2 de septiembre de 484/1.091. El actual Salón de Embajadores, identificada con el Palacio o Qaşr al-Mubarak/Alcázar de la Bendición, se encontraría también al-Qaşr al-Zahi/el Prospero. Tan solo el Palacio de al-Mukarran, en el área de San Martin. Otros Qaşr, la Dar al-Muzayna o el de al-Wahīd, no han podido ubicarse por el momento con seguridad.
      Al-murábiţ/almoravides que entran en Išbylīya como fuerzas de ocupación, no obstante bien recibidas por un sector numeroso de la población, cerraron el espacio que va desde la Plaza del Triunfo hasta el rio. Allí se acomodarían al-Qaşába, palacios, cuarteles y la administración de las dinastías africanas que, desde la madīnat, gobernaron gran parte o la totalidad del territorio de al-Āndalus. Al-murábiţ planificaron y rodearon de su primera muralla el perímetro que ha perdurado hasta nuestros días como límite del casco histórico de Išbylīya. Un circuito de contornos ovalado de 7.300 m. de longitud que encierran 287 ha. de superficie. Extendiendo el cinturón defensivo hacia el Norte, alcanzaron la lína Puerta Osario-Puerta de Córdoba, Macarena y Barqueta, dejando en su interior amplias zonas libres que se edificarían a lo largo del s. XII.
      Abū Ya´qūb Yūsuf el Calīfa al-muwaḥḥád, encargó se trasladasen los mandos a Išbylīya, desde Garnāţa, instalándose en la vieja al-Qaşába, que entonces comprendía la Dār al-Imāra del s. IX. Mandó construir las murallas por el lado del río a su costa, después que las derribó la inundación grande el año 564/1168, por la gran crecida que hizo salir las aguas por todas partes y las construyó de piedra y cal, desde ras de tierra hasta la altura que tienen hoy En el año 564/1169 dio comienzo la gran operación urbanistica de reforma del sector meridional de la madīnat, con la construcción de diversos recintos militares periféricos, ubicados todos ellos entre el límite Sur de la madīnat pre-al-murábiţ, el trazado de la nueva muralla y el cauce del arroyo Tagarete se añadieron las dos al-Qaşábas al-muwaḥḥád, llamadas interior y exterior, mientras la defensa del puerto y madīnat se completó con la Būrŷ al-Dahab/Torre del Oro, era una torre albarrana de doce lados, una especie de apéndice que se proyectaba desde al-Qaşr, se conectaba con el recinto de gobierno por un muro o qawraŷa/coracha, hoy desaparecido, partía de otra torre de diez lados, la Torre de la Plata, con otra torre que no existe actualmente (de ocho lados) con la Torre de ´Abd-al-Aziz, (de seis lados), con la torre de Santo Tomás (de cuatro lados) atravesando el Arenal, con función de control y defensa del puerto fluvial, que se cerraba con una fuerte cadena que unía esta torre, con otra, desaparecida, al otro lado del río, en al-rabaḍ/arrabal de Ţiryāna/Triana, llamada Torre de la Fortaleza. Además de las necesidades de defensa, la capitalidad en Išbylīya fue acompañada de importantes transformaciones urbanas. En primer lugar, el aumento de población provocó la aparición de nuevos barrios residenciales. Una zona de expansión dentro de los límites de la muralla, fue el sudeste, actual Barrio de San Bartolomé, entre la Bāb de Qarmūna y al-Qaşr, con entrada desde el exterior por la Bāb de Ŷawar. El conjunto se organizó sobre un eje: actuales calles de san José y de Santa María la Blanca, en cuya plazuela se sitúa un pequeño zoco, Azueyca, con tiendas fijas que se mantenía aún en época cristiana, cuando se localiza en éste sector la judería. Tuvo dos sinagogas, citadas en 1252 como utilizadas por los judíos y convertidas luego en Iglesias de san Bartolomé y de Santa María la Blanca. Y en el mismo año restauró el techo de madera, reforzó con torreones el muro del lado de poniente, pavimentó el suelo y recubrió los arcos con yeso y cal de la vieja mezquita del s. IX de ´Umar ibn ´Adābbas/Salvador, que había sido la Masyid al-Ŷamá‘a de Išbylīya hasta la construcción del edificio más emblemático de la Išbylīya al-muwaḥḥád, la nueva Masyid al-Ŷamá‘a ya desaparecida. Además mandó construir: - al-Buayra, posterior Huerta del Rey. En el paraje extramuros llamado de al-Buayra, diminutivo de “laguna de mar”, junto al arroyo Tagarete y rodeado de huertas, lindero con la antigüa Bāb de Ŷawar o Puerta de la Carne el Amīr Abū Ya´qūb Yūsuf ordenó la construcción de un Palacio
- A la vez qe se construia La Masyid al-Ŷamá‘a/Mezquita Djema Mukyarrim hoy Catedral y la Giralda, en el año 1184 el Calīfa al-muwaḥḥád Abū Ya´qūb Yūsuf ordenó fabricar unas dār al-şinā´a/atarazanas en su capital āndalusī, yuxtapuesta a la muralla y con el Arenal del río por delante, sobre el solar en parte ocupado hoy por el Hospital de la Caridad, que serían restauradas por Alfonso X.
- Puente de Barcas, que unía la Madīnat išbylīyana con al-rabaḍ de Ţiryāna, en la margen derecha de wādī-l-Qabīr, el primer paso estable sobre el río en su curso bajo
En el frente cercano a Bāb de Šariš/Puerta Jerez, en el solar donde en el s. XVI se edificó la Casa de Contratación, quedaba un nuevo recinto, al-Qaşr al-Mubārak. De éste último Palacio y su patio reconstruido a finales del s. XII, con galería bajo paños de sebka, y el jardín, cuyo trazado en cruz plasma la imagen del paraiso musulmán regado por sus cuatro ríos convergentes en un gran lago central hay referencias a su utilización ya en 1172, cuando sirvió de alojamiento a los hijos de Mwḥāmmad ibn Sa´d ibn Mardanīš “El Rey Lobo” de Mursiya que acudieron a Išbylīya para solicitar la paz ante el Califa. Este Palacio era llamado en la época medieval cristiana como Alcázar Viejo. Actualmente solo se conserva del Palacio islámico el Patio del Yeso.
      Se ha localizado a poniente de al-Qaşr al-Mubārak, junto a la desembocadura del Tagarete en el wādī-l-Qabīr, prolongando el heterogéneo conjunto de los Reales Alcázares hasta la misma orilla del río, conectado incluso por una muralla de al-Qaşába exterior, áun se levantó otra residencia fastuosa, al-Qaşr al-Zahī, que fue residencia del Sayyid/señor Abū Ḥafş, el ilustre šáyẖ/jeque guerrero hermano del Calīfah Abū Ya´qūb Yūsuf. Basado probablemente, sobre otras edificaciones anteriores de los ´Abbādíes, abarcaba una superficie fortificada a la salida de Bāb al-Kuhl/Postigo del Carbón de donde partiría la coracha de unión entre las Torres de la Plata y del Oro. Construido por al-mušríf /almojarife Mwḥāmmad ibn al-Mu´alim. Parece que tenía un patio muy alargado, de proporciones similares a Ŷannat al-'Arif /Generalife de Garnāţa En el mismo recinto, y bajo la vigilancia del propio Abū Ḥafş, estuvo la Sákka/ceca al-muwaḥḥád, función que se perpetuó en época cristiana, transformandose la zona en Casa de la Moneda.
    Más importante debió ser la actuación al-muwaḥḥád en Dār al-Imāra, donde se localiza el llamado Cuarto Real o de Crucero identificado como residencia del soberano
Entre 1170 y 1172, Abū Ya´qūb Yūsuf edificó las rampas cubiertas de las Bāb de Išbylīya, por el lado del río, en prevención de la corriente, que se desbordaba sobre ella. Labró al-Qaşába interior y la exterior en las afueras de la Bāb de al-Kuhl/Postigo del Carbón. Por entonces, además se excavaron fosos y se levantó el llamado “muro Ŷawar”, lienzo de unión entre Bāb de Ŷawar/Puerta de la Carne con el recinto de la primitiva al-Qaşába del s. IX, recinto que hasta 1171 fue independiente de la cerca de la madīnat, a lo largo del actual Callejón del Agua, cuyo muro soportaba una acequia de abastecimiento de al-Qaşr.
      Abū Ya´qūb Yūsuf llevó a cabo la canalizacion de aguas residuales y la traida de aguas hasta el centro de la madīnat a través de un acueducto romano restaurado, los Caños de Carmona, puestos en funcionamiento en 1172. De ellos se sacaba el caudal suficiente para regar las huertas de la Buhayra o atender las necesidades de la amplia red de Ḥammām publicos existentes en Išbylīya, prácticamente uno al lado de cada una de las mezquita de cada barrio.
 
    La llegada de los castellanos al-Qáşr/Alcázar en 1248 tras el largo asedio de Fernando III supuso un cambio de manos sin paliativos, se convirtió en alojamiento real, su hijo Alfonso X el Sabio llevó a cabo las primeras reformas tras la conquista, ordenando en 1254 la construcción de tres grandes salones en estilo gótico. (la Capilla Gótica, el Apeadero, el Patio de la Montería y los Grutescos de los jardines) En 1364, Pedro I de Castilla (1350-1369) decidió construir el que se convirtió en el primer palacio de un rey castellano que no estaba protegido tras los muros y defensas de un castillo, el denominado Palacio Mudéjar, que se convirtió en el primer palacio de un rey castellano que no estaba protegido tras los muros y defensas de un castillo, y alcanzando el aspecto mudéjar que hoy conserva y asombra por su riqueza y ornamentación. El Palacio fue levantado entre 1356 y 1366 por decisión del rey castellano con la participación de constructores y alarifes procedentes de Toledo, Sevilla y Abū ´Abd Allāh Mwāmmad V al-Ganī bi-Llāh 755/1354-792/1391 Granada, que supieron darle un acabado original para la época, sobre todo estético. Los trabajos nunca se dieron por concluidos, ni en lo relativo a las estructuras ni en lo ornamental, detectándose obras tan significativas como la de la Cúpula del Salón de Embajadores en pleno siglo XV. En 1477 Isabel I, reina de Castilla y León y Fernando II, rey de Aragón llegaron a Sevilla, utilizando el recinto como aposento y un año después, el 14 de junio de 1478, nació en el palacio, su segundo hijo, el príncipe Juan. En 1526 se celebró en el Alcázar, la boda de Carlos V con su prima Isabel de Portugal; en una de sus estancias nació en 1848 la infanta Isabel, nieta de Fernando VII. En 1823, con motivo de la intervención militar de los Cien Mil Hijos de San Luis, la familia real, con Fernando VII a la cabeza, residió en Sevilla durante dos meses, en los que el Alcázar sirvió de residencia real. Coincidiendo con esta estancia real, el 17 de abril de 1823, nació en la ciudad, el infante Enrique de Borbón y Borbón-Dos Sicilias, hijo del infante Francisco de paula de Borbón y Luisa Carlota de Borbón- Dos-Sicilias, y al que el rey Fernando VII le concedió, algunos días después de su nacimiento, el título de Duque de Sevilla Por decreto de 22 de abril de 1931, el Gobierno de la II República española, a propuesta de su ministro de Hacienda, Indalecio Prieto, cedió el Alcázar y sus jardines al municipio de Sevilla. El último acontecimiento relacionado con la monarquía fue el 18 de marzo de 1995, en que se celebró el almuerzo y recepción con motivo de la boda de la Infanta Elena, hija del rey Juan Carlos I, con Jaime de Marichalar.

Puerta del León

La entrada actual al Alcázar se realiza a través de la denominada puerta del León, llamada antiguamente Puerta de la Montería, por servir de entrada o zaguán al patio de dicho nombre. Su construcción está realizada en estilo almohade, cubierta por un panel de azulejos realizado en cerámica trianera de la fábrica de Mensaque, en el año 1894, según proyecto del historiador José Gestoso. Cruzada la muralla árabe del siglo XII, se accede al Patio del León. A la izquierda de este patio se encuentra la

Sala de la Justicia
También denominada Sala de los Consejos, formaba parte del primitivo palacio musulmán, este palacio era el denominado mexuar, donde se reunía el Consejo de Visires, labor que continuó bajo la monarquía cristiana. Es una estancia de planta cuadrada cubierta por una armadura de madera mudéjar, que fue construida en el siglo XIV durante el reinado de Alfonso XI. Aneja a la misma se encuentra el

Patio del Yeso
Una de las pocas construcciones que permanecen de la época almohade, de planta casi cuadrada, presenta una alberca en el centro y destacan los arcos porticados de uno de los lados del patio, sobre los que aparece una rica decoración.

Y tal como salimos de la Sala de Justicia, giramos a nuestra izquierda y atravesamos un conjunto de tres arcos en una muralla, resto de un antiguo lienzo almohade que formaba parte del entramado defensivo del Alcázar. Estas aperturas fueron realizada, con posterioridad a la construcción del Palacio del rey don Pedro I, al abrirse a eje con el palacio. Los dos arcos laterales son gemelos y fueron primitivamente de forma de herradura, el central, de mayor altura que sus laterales, conforma un arco de medio punto peraltado, realizado en piedra. Traspasados los arcos se accede al

El Patio de la Montería
El patio de forma trapezoidal, está presidido en la zona central por la fachada del palacio mudéjar del rey Pedro I. De clara inspiración granadina, pues en su realizacion intervinieron artesanos de dicha ciudad, vemos claramente la proliferacion de arcos ciegos y curiosamente inscrustaciones de azulejo blanco y azul , con el lema de los nazaries “wa lā gīlab īly Allāh” Sólo Dios es vencedor, recordemos que Pedro I era cristiano. En la parte superior un magnífico alerón de madera, obra de la carpinteria típica toledana. Aunque es obvio, el nombre de Patio de la Monteria se debe a que era el lugar de cita y partida de caza del rey y su corte, en los contiguos y enormes jardines.
Fue en este patio donde se celebró el banquete nupcial, de la Infanta Elena hija mayor de Juan Carlos y Sofía el 18 de marzo de 1995

En el lado derecho del patio se localiza un corredor a doble altura que avanza a lo largo de todo el edificio, separado con arcos de medio punto y columnas de mármol, de orden toscano en la parte baja y de orden jónico en la superior que se halla acristalada. Desde este lado derecho se accede al denominado

Cuarto del Almirante
Bajo el rico artesonado de tracería del siglo XVI y ante el retablo de la Virgen de los Navegantes de Alejo Fernández entre 1531 y 1536.
Tras el descubrimiento de América, la reina Isabel la Católica decidió en 1503, la creación de la Casa de Contratación de Indias, organismo institucional encargado de regular las relaciones con el continente americano, y que realizaba labores de remisión y recepción de mercancías, actuaciones de carácter técnico científico y actividades judiciales, incluidos los pleitos surgidos entre comerciantes. En sus salas también se proyectaron los más célebres viajes de los descubridores, como la Primera Vuelta al Mundo de Magallanes.
Por el lado izquierdo del patio se llega al Patio del Crucero y al Palacio Gótico, reconstruido parcialmente en el siglo XVIII

Descripción de las salas actuales
Las salas que se conservan, comprenden un primer salón inicial en la que se encuentran varios cuadros de relieve, entre los que destacan, "La inauguración de la Exposición Iberoamericana de 1929" que preside la estancia, obra del pintor Alfonso Grosso, "Las postrimerías de San Fernando", de Virgilio Mattoni "la Toma de la Loja por Fernando el Católico" obra de Eusebio Valldeperas y los retratos de Fernando VII y María Cristina de Nápoles de Carlos Blanco, fechados en el primer tercio del siglo XIX. A continuación, se encuentra la denominada Sala de Audiencias reconvertida posteriormente en Capilla, está cubierta con rica techumbre de tracería del siglo XVI con adornos geométricos; la capilla posee una grada de piedra adosada al muro que recorre el perímetro de la sala y presidiendo la estancia se encuentra un valioso retablo de la Virgen de los Navegantes, flanqueada por cuatro santos (san Telmo, san Juan, san Sebastián y Santiago, patrón de España) original de Alejo Fernández, elaborado entre 1531 y 1536

Palacio mudéjar o de Pedro I

Fue construido por iniciativa del rey Pedro I, entre 1356 y 1366, en su construcción colaboraron artesanos de Toledo, Granada y de la propia Sevilla, posteriormente fue transformado en época de Isabel I, reina de Castilla y León y Fernando II, rey de Aragón y de los primeros Austrias. Según las investigaciones arqueológica, el palacio del rey Pedro constituyó un proyecto de nueva planta, que se elevó en un lugar donde existían construcciones anteriores.
Ha quedado demostrado que en el espacio triangular, bajo el Palacio de Pedro I se edifica otro palacio independiente regido por los mismos principios de orientación que los demás (los situados bajo la Montería, Príncipe, Asistente, Contratación y Doncellas occidental). Dicho inmueble se organiza del mismo modo, es decir, crujías alargadas con luces menores de tres metros en torno a un patio central cuyo lado Este y su crujía contigua se adecuarían a la muralla del al-Qáşr.
En total, bajo el Palacio de Pedro I, y por tanto destruidos por completo por él, se ubicaban cinco edificios diferentes.
  • Palacio 1. Al Sureste del Palacio de Pedro I. Situado en el ángulo formado por la muralla occidental del segundo recinto del al-Qáşr, (´abbādí) y el lienzo meridional de la muralla del tercer recinto de origen al-muwaḥḥád.
  • Palacio 2. Al Sur del Palacio de Pedro I. Localizado en 2002 en el sector suroeste del Patio de las Doncellas. Se organiza en torno a un patio cuyo centro se situaba bajo la galería occidental del patio.
  • Palacio 3. Al Suroeste del Palacio de Pedro I. Situado fundamentalmente bajo la mitad Sur del Patio del Príncipe. Se localizó en la campaña de 2000. Se distribuía bajo el Patio del príncipe y el sector occidental del Palacio de Pedro I. Su centro estaría bajo la galería del Príncipe. Lindaba con el palacio 2 mediante el gran eje Norte Sur, que servía de eje central de la ampliación al-muwaḥḥád, ubicado bajo el Salón de Embajadores.
  • Palacio 4. Al Noroeste del Palacio de Pedro I. Situado al sur del de la Montería. Separados ambos por una medianera en la que se abrían originalmente puertas de comunicación. La campaña de 1997 demostró que se organizaría en torno a un patio cuyo centro se situaría en el sector del vestíbulo y acceso a los Baños del Palacio de Pedro I.
  • Palacio 5. Al Noreste del Palacio de Pedro I. De reducidas dimensiones, es el único que mantenía una orientación regida por la muralla del al-Qáşr. Sus restos se excavaron en 1997 (Corte I de la Montería)
Fachada
En la fachada destaca la puerta con marco adintelado, obra de los maestros toledanos, se encuentra adornado con labores de atauriques. Sobre el dintel se extiende una franja de arcos estrechos polibulados ciegos sobre columnillas, que se encuentran rellenos de motivos vegetales y heráldicos. Por encima se abren las ventanas del piso superior. En la portada, un gran alero o tejaroz, que se encuentra sostenido por mocárabes dorados, alberga una inscripción, en caracteres góticos, relativa a la fundación del palacio que manifiesta "el muy alto et muy noble et muy poderoso et muy conqueridor don Pedro por la gracia de Dios rey de Castilla et de León, mandó fazer estos alcázares et estos palacios et estas portadas que fue fecho en la era de mill et quatrocientos y dos años". Esta inscripción sirve de marco para un friso de cerámica que repite en ocho ocasiones, el lema de los nazaríes “wa lā gīlab īly Allāh” Sólo Dios es vencedor

Vestíbulo
Distribuye los dos sectores del palacio, hacia la izquierda se dirige hacia el Patio de las Doncellas, hacia la derecha a través de un corredor angosto se puede acceder al Patio de las Muñecas, que constituía la parte más reservada y que de esta manera tenía un acceso directo al exterior sin atravesar la parte oficial del palacio.

Patio de las Doncellas
Debajo del patio de las Doncellas, se localizan al menos tres edificios coetáneos pero de diferente calidad y orientación. Entre ellos una posible calle parece marcar un eje radial respecto al-Qáşr ´abbādí. Esos edificios, junto con el localizado bajo el Patio de la Montería en 1997, la catedral y en el Archivo de Indias, constituirían un arrabal extramuros aparentemente mal organizado y formado por viviendas construidas de manera espontánea.
Se situaría según Mwḥāmmad ibn ´Abdūn al-Ŷabalí al-Udrí junto al cementerio de al-Yabbana junto al-Qáşr, entre la muralla urbana y el puerto, llegando a ocupar la zona que en 1172 sería expropiada para levantar la Masyid al-Ŷamá‘a/Mezquita Aljama del Califa Abū Ya ´qūb Yusūf. Se trata del denominado barrio de Ibn Jaldun localizado en las excavaciones de la “Acera de Levante” y bajo los pilares de la catedral y la Puerta del Perdón. Este arrabal fue eliminado gradualmente entre 1150 y 1172 de sur a norte a medida que avanzaban las obras del nuevo al-Qáşr/Alcázar y de la Masyid al-Ŷamá‘a/Mezquita Aljama.
Es un patio de forma rectangular que presenta en la planta baja una serie de arcos lobulados sobre dobles columnas de mármol y en la planta superior, una arcada de medio punto sobre columnillas jónicas de mármol con balaustrada, que fue añadida hacia 1540, bajo el reinado del rey Carlos V por el arquitecto real Luis de Vega.
En 1572, en época del rey Felipe II, se cambió la fisonomía del patio, procediéndose a enlosar el mismo, colocándose una fuente en el centro. En los primeros años del siglo XXI, el patio ha recuperado la primitiva estructura que tenía en los tiempos del rey Pedro I, esta configuración ha supuesto la desaparición de las losas del patio y su sustitución por una alberca que corre a lo largo del mismo, rodeada por arriates rehundidos.
En tres de los lados del patio se abren las habitaciones que componen la planta baja del palacio. El cuarto de los lados está adosado al palacio de Alfonso X por lo que sólo presenta las galerías que cierran el patio
Patio principal, una obra maestra del arte mudéjar andaluz. Desde la entrada al Patio de las Doncellas nos encontramos a la derecha la Alcoba Real, enfrente se encuentra el Salón de Embajadores y a la izquierda el Salón del Techo de Carlos V. En la planta superior del palacio se encuentran los apartamentos reales, redecorados en el siglo XVIII. El conjunto de habitaciones y patios que forman la planta baja de este palacio son los siguientes:

Alcoba Real
A la derecha del patio se encuentran las Salas regia y la Alcoba Real, conocidas ambas como dormitorio de los Reyes Moros. Constituyen dos salas paralelas, en la que la más exterior, abierta al patio por arco peraltado y tres ventanas con celosías caladas, constituía la sala real en la que destaca una magnífica techumbre, donde se combinan los elementos geométricos de lacería y los motivos renacentistas y la interior que componía el dormitorio de verano del rey. Se hallan separadas por un triple intercolumnio.
Salón de Embajadores
El Salón de Embajadores, también denominado de la media naranja, era la qubba, una de las salas principales del palacio, que centraba el ceremonial público de la corte. Se encuentra su entrada en el acceso abierto en el lado menor del Patio de las Doncellas y a través de un gran arco que conserva las puertas originales, realizadas por carpinteros toledanos en 1366, compuestas por hojas talladas en madera de pino ataujeradas, doradas y policromadas, con inscripciones en árabe, en su cara externa, y castellano, en la interna.
La sala presenta una planta cuadrada con arquerías triples de herradura en dos de sus lados, sostenidos por columnas de mármol de distintos colores y capiteles califales en cada frente. En la decoración destaca la bóveda semiesférica, que se levanta sobre pechinas de mocárabes dorados, fechada en 1427, obra original del carpintero Diego Ruiz. También destacan los paños de alicatado que presentan la parte baja de los muros con temas de lazo y la magnífica ornamentación de yeserías con temas geométricos en su parte superior. El conjunto se rompe con los balcones construidos en 1592. En la parte superior hay una galería donde están representados los retratos de reyes españoles desde Recesvinto a Felipe III, debajo de su pintura leemos el nombre de cada monarca, su heráldica y sus fechas de comienzo y duración de cada reinado.
A ambos lados de esta sala se encuentran las denominadas salas colaterales, en las que sobresale la decoración de los frisos de yeserías donde aparecen unos medallones con siluetas blancas que representan escenas de temas caballerescos y cinéticos entre esfinges y arpías.

Salón del Techo de Carlos V
Situada en el lado contrario al dormitorio del Rey Moro. En sus orígenes debió ser la capilla del Palacio. Destaca la techumbre de casetones con medallas y escudos imperiales, que resultan una de las mejores muestras renacentistas del Alcázar.
Patio de las Muñecas
Desde la Sala de Felipe II se llega al Patio de las Muñecas, cuyo nombre se debe a los pequeños rostros visibles en varios de los arcos, con bellísima ornamentación de azulejos y arabescos de estuco, es típico animar a los visitantes que descubran las caritas de muñecas talladas en diversas columnas, se pueden encontrar nueve caras, en distintas zonas de la estancia. Destaca las columnas y capiteles procedentes de Madīnat al-Zahrā’ (Córdoba). El patio fue objeto de restauración, a partir de 1833, en ella se renovaron las yeserías originales de la planta baja y se construyó la planta alta, también se intervino en la sala del príncipe.

Cuarto del Príncipe
Situado junto al Patio de las Muñecas, recibe este nombre por Don Juan, hijo de Isabel I, reina de Castilla y León y Fernando II, rey de Aragón, nacido en el Alcázar en 1478.

Salón del techo de Felipe II
Sala de carácter rectangular, también conocida como de la media caña por la forma de su techo, comunica con el Salón de los Embajadores a través del Arco de los Pavones.

Planta Alta o palacio Alto
Constituyen las habitaciones que se encuentran en la planta superior del Palacio Mudéjar, fueron ampliados y transformados en tiempos de Isabel I, reina de Castilla y León y Fernando II, rey de Aragón, lo que incluyó la sustitución de techumbres del piso inferior que al ser a dos aguas, se convirtieron entonces en planas para soportar el suelo de la estancia superior. Estas habitaciones no son visitables, quedando al uso privado de la familia real. Las estancias más destacados que se encuentran en esta planta superior son:
  • El oratorio de los Reyes Católicos y altar de la Visitación original del ceramista Niculoso Pisano.
  • La galería Altas del Patio de las Doncellas.
  • La cámara de la reina.

Palacio gótico

Palacio mandado edificar por el rey Alfonso X, en 1254, y que sirvió como Corte de este rey.
Se accede a él desde el patio del Crucero o también desde las escaleras existentes en el Patio de las Doncellas.

Capilla
Destaca la Capilla presidida por un retablo de la Virgen de la Antigua, realizado en en siglo XVIII por Diego de Castillejo y que contiene una copia anónima de la existente en la Catedral de Sevilla. Los muros presentan zócalos de azulejos realizados por Cristóbal de Augusta.
 
Sala gótica
Durante el siglo XVI se llamó Sala de Fiestas porque en ella se celebraron los banquetes con ocasión de las boda real del rey Carlos I. Durante el reinado de Felipe II fue remodelada para adaptarla al gusto de la época, dándole un toque más renacentista, los muros se cubrieron con zócalos altos de azulejos, entre los que destacan los realizados por el ceramista Cristóbal de Augusta entre 1577 y 1583, en los que se rinde homenaje a Carlos V, con las efigies del caballero y la dama representando al emperador y su esposa, también se sustituyen los pilares por ménsulas manieristas y se pintan las bóvedas.

Salón de los Tapices
Ubicada frente al patio del crucero, esta sala se reconstruyó de nueva planta a partir del Terremoto de Lisboa. Constituye un salón decorado con grandes tapices que representan la conquista de Túnez en 1535 por el emperador Carlos; son de origen flamenco y fueron tejidos por Francisco y Cornelio Van der Gotte.
Los tapices originales, pertenecientes al Patrimonio Nacional, en la actualidad forman parte de la colección del Palacio Real de Madrid, y fueron restaurados en el año 2000. Estos fueron ejecutados en Bruselas a partir de 1546 por encargo de la regente María de Hungría, hermana del emperador Carlos V; los diseños son de Jan Cornelisz Vermeyen y Pieter Coecke van Aelst, y fueron tejidos en el taller de Willem de Pannemaker. La colección estuvo expuesta en Londres en 1554, por motivo del matrimonio entre el príncipe heredero Felipe y la reina María Tudor. En el siglo XVIII los originales estaban demasiado dañados, por lo que el rey Felipe V encargó en 1740 las copias de los hasta ahora mencionados tapices, estas copias en seda y lana desde 1929 se exponen en el Salón de Tapices del Palacio Gótico del Alcázar sevillano.

Patio del crucero
El patio del crucero, fue construido en el siglo XII, durante el periodo almohade de tamaño superior al que hoy presenta, añadiéndosele en tiempos de Alfonso X, bóvedas de crucería, el jardín presentaba dos niveles, el más alto correspondería al que tiene actualmente el patio, con dos galerías principales en forma de cruz y otras cuatro periféricas, y un segundo nivel, 4,7 metros por debajo del anterior, ocupado por un jardín con naranjos, dividido en cuatro partes, en cuyo centro se situaba una gran fuente y en los extremos albercas. A raíz del terremoto de Lisboa se tapó este jardín inferior, rellenándolo de tierra y formando el actual patio rectangular. Los vestigios visible de este piso inferior pueden ser contemplados desde el patio del crucero y la única parte que sobrevive son los llamados Baños de Doña María (María de Padilla (1334-1361) fue una noble castellana, famosa por sus amores con el rey Pedro I de Castilla, con el que tuvo tres hijas: Beatriz entró en una orden religiosa, Constanza se casó con Juan de Gante, duque de Lancaster e Isabel con edmjndo de Langley, duque de York, hijos ambos del rey Eduardo III de Inglaterra), a los que se accede desde el Jardín de la Danza. Este sótano está formado por una gran nave de diez tramos cubiertos por bóvedas de crucería. La entrada desde el jardín está cubierta con una larga bóveda de cañón.

Jardines
Los Jardines suponen una parte fundamental del Alcázar, habiendo experimentado diversas transformaciones estilísticas, desde su trazado primitivo. Están dispuestos en terrazas, de vegetación verdeante, multitud de naranjos y palmeras, con fuentes y pabellones.
La parte más próxima al palacio, realizada en época renacentista, se encuentra compartimentada por muros decorados con fuentes y portadas manieristas, sin ninguna vinculación entre ellos, lo que los enlaza con la herencia musulmana, al igual que la proliferación de fuentes bajas forradas de azulejos y la práctica de cubrir los muros con naranjos en espaldera. Estos jardines más próximos al conjunto arquitectónico son los siguientes, comenzando por la Puerta del Palacio de los Duques de Arcos, una de las puertas que comunica el interior del Alcázar hacia la derecha:

Jardines de Mercurio
Formado por un gran estanque, situado a la altura del palacio y más alto por tanto que el resto de los jardines, se encuentra presidida la alberca por la figura del dios Mercurio, realizada poriego de Pesquera y fundida por Bartolomé Morel en 1576, de estos autores son también las barandas con leones en escudos en sus ángulos y 18 bolas con remates piramidales que rodean el estanque. Todas estas piezas fueron doradas en su origen, quedando algún resto del recubrimiento.
De fondo se encuentra la Galería del Grutesco para cuya construcción se aprovechó un antiguo lienzo de muralla almohade, Su transformación en mirador y decoración se debe fundamentalmente a Vermondo Resta, realizada alrededor de 1612, siendo considerada la más manierista del Alcázar, está realizada por labores rústicas en piedras de distinto tipo que simulan rocas marinas. Con estos elementos pétreos también se enmarcan espacios cuadrangulares y de medio punto en los que en su mayoría hay pinturas murales imitando mármol rojizo, en las que también se pintaron figuras, fábulas mitológicas y aves exóticas, realizadas por Diego de Esquivel en el siglo XVII. La galería se encuentra rematada en la parte superior a modo de castillete almenado. Frente al estanque, se conserva una fuente con órgano hidráulico del siglo XVII, recientemente restaurada.

Jardín de la Danza
También conocido como Jardín de las Damas. Es un espacio de carácter rectangular dividido en tres tramos, desde el que se accede al llamado "Baño de Doña María de Padilla", que constituye el jardín subterráneo del Jardín del Crucero. Es un gran estanque con arcos de nervadura en su parte superior.
En un nivel superior se encuentran dos columnas que en su momento estuvieron rematadas con esculturas de personajes mitológicos, que representaban un sátiro y una ninfa bailando. En la zona inferior destaca una fuente que data del siglo XVI, decorada con azulejos.

Jardín de Troya
Este jardín adosado a la zona palaciega tiene origen musulmán que se mantiene hoy en detalles como la intimidad proporcionada por los muros que los separan del Jardín de las Damas, la musicalidad de las fuentes y la fragancia de las plantas aromáticas. La fuente central consta de una taza del siglo X. La galería rústica que cierra el jardín fue realizada por Vermondo Resta en 1606, en estilo manierista.
También es llamado del Laberinto, nombre debido a las calles que componían su solería, en el centro del mismo se encuentra una fuente. Este laberinto que aquí existía fue suprimido a principios del siglo XX.

Jardín de la Galera
Está constituido por el espacio hacia el fondo del jardín de Troya. Posee un corredor posiblemente de origen del siglo XVI. Un muro con arco central lo separa del contiguo Jardín de las Flores. Su nombre procede de las galeras de mirto que adornaban este jardín y que se veían desde la galería balconada que sale del Salón de Embajadores.
 
Jardín de las Flores
Compuesto por un estanque acodado en el muro, forrado por azulejos que datan de 1561.

Jardines del Príncipe
Es el último de los jardines de este primer tramo y los más antiguos, su nombre procede del nacimiento, en un cuarto próximo, del príncipe Juan, hijo de Isabel I, reina de Castilla y León y Fernando II, rey de Aragón. El trazado es de crucero y tiene una plantación heterogénea donde coexisten indiscriminadamente, palmera, ciprés, magnolio, granado, naranjo y otros arbustos, todo distribuido irregularmente, destaca la fuente de Neptuno.





Puerta del Privilegio que atraviesa la galería del Grutesco y separa en dos partes los jardines del Alcázar.
En dirección a la izquierda hacia la salida del recinto del Alcázar se encuentran:
  • Jardín del Chorrón
  • Jardín de la Alcubilla


Del resto de los jardines cabe distinguir los que se encuentran antes de atravesar la Galería del Grutesco, esta galería avanza en dirección noroeste-sureste por los jardines y se extiende hasta el llamado Jardín del Laberinto, dividiendo la zona verde en dos partes bien diferenciadas, a un lado se encuentran:
  • Jardín Inglés. Por responder al estilo paisajista originado en las Islas Britanicas durante el siglo XVIII. Se asienta sobre la puerta de la Alcoba, de origen islámico. Se estableció este parque en los años siguientes a 1909, encargádosele el replanteo al jardinero mayor de la Real Casa de Campo, Juan Gras. Su estilo es una adecuación dudosa para un espacio delimitado por murallas y su interés radica sobre todo en las diferentes especies y ejemplares arboréos.
  • Jardín de la Cruz
Cenador del León o del Naranjal o de la Alcoba, con la fuente del León. En el se encuentra el Pabellón de Carlos V, construcción de 1543 con planta cuadrada y pórticos en sus frentes y cubierta por una bóveda semiesférica. La decoración es de azulejos y yeserías, realizadas por Juan Fernández, con mezcla de motivos mudéjares y renacentistas, donde se cree murió el rey Fernando III y una vez restaurado, celebró su boda el rey Carlos I.
  • Laberinto
Al otro lado de la galería del Grutesco que se atraviesa por la Puerta del Privilegio se accede a lo que constituía la primitiva zona de huertas, convertidas también en jardines en los que abundan naranjos y limoneros:
  • Jardín del Marqués de la Vega Inclán. Muestra un trazado seguramente inspirado en el Jardín de las Damas, aunque siempre careciendo del refinamiento manierista que éste tuvo en su origen. Está constituido por veinte parterres, cuadrados en su mayoría, separados por calles y con fuentes en las intersecciones de inspiración islámica y renacentista.
  • Jardín de los Poetas. Construido entre 1956 y 1958. Debido a Joaquín Romero Murube, que muestra un estilo muy semejante al empleado por Forestier. Su parte más emblemática son dos estanques alineados de reminiscencias árabes y romanas.
  • Jardín de la Alcubilla. Este jardín existía ya en tiempos de Carlos V.

Puerta de Marchena.
Este famoso monumento gótico del siglo XV, adquirido por Alfonso XIII durante la subasta de los bienes de los duques de Osuna y por mediación del marqués de la Vega Inclán, fué trasladado desde su lugar de origen en el Palacio de los Duques de Arcos de Marchena. En 1913, el arquitecto Vicente Traver lo instala en su ubicación actual del Alcázar, en la entrada a los nuevos jardines que se estaban construyendo en la llamada "Huerta del Retiro", junto a la Torre del Enlace ó del Agua.

Apeadero y Patio de Banderas

El apeadero es un amplio zaguán a través del cual se sale del Alcázar, presenta fachada al Patio de Banderas, es obra del arquitecto Vermondo Resta, ejecutada por el cantero Diego Carballo. En el remate de la fachada aparece el escudo del Felipe V. el Patio de Banderas constituye una gran plaza donde se colocaban las banderas que señalaban la presencia de algún rey en palacio, funcionaba como Plaza de Armas del recinto militar del Alcázar.